Las plantas verdes son todas las plantas terrestres, dentro de sus procesos principales podemos encontrar: la fotosíntesis, respiración celular, circulación, coordinación y otros.
La coordinación de cada planta es llamado tropismo o tactismo, que puede ser positivo o negativo, lo cual depende de la respuesta en forma de crecimiento por parte de la planta hacia el estimulo, el nombre de esto se da según el estimulo, un ejemplo de esto puede ser la kañiwa que es una planta que crece en temperaturas muy bajas y heladas, con lo que obtenemos que se encuentra en termotropismo negativo.
Uno de los problemas de salud, que encontramos en mayor cantidad de casos en la región de Apurímac, es la desnutrición, la cual se causa principalmente por la pobreza extrema y mala alimentación de los pobladores en esta región.
La investigación realizada por el UNICEF y de los datos proporcionados por el INEI, expone que Apurímac es la segunda región más humilde del país (69.5%), se traduce principalmente en desnutrición crónica infantil. Según el presidente regional David Salazar Morote el 43% de infantes menores de 5 años y el 40% de los niños entre 6 y 9 de edad sufren este problema.
Debido a esto se plantea el consumo de la kañiwa que es una planta de la cual se obtienen las semillas para producir harina o galletas de esta, y así poder ser consumida por los pobladores, ya que contiene un gran valor nutricional y también fortalece el sistema inmunológico.
Las semillas de cañihua ofrecen un alto contenido proteico para las dietas escasas en carnes. Además poseen un balance de aminoácidos de primera línea siendo particularmente rica en lisina, isoleucina y triptofan. Esta calidad proteica en combinación con un contenido de carbohidratos del orden del 60% y aceites vegetales del orden del 8%, la hacen altamente nutritiva.
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